Onfale es un personaje de la mitología griega que ha sido descrito en diversas obras y textos antiguos. Según la tradición, ella era la reina de Lidia, una región ubicada en el oeste de Asia Menor.
Onfale era conocida por su belleza y su inteligencia. Se decía que tenía un gran poder sobre los hombres, ya que su encanto era irresistible. No solo era una mujer bella, sino que también era muy astuta y sabia.
En algunos relatos, se dice que Onfale era amante de Heracles, el famoso héroe griego conocido por sus doce trabajos. Según la leyenda, Heracles fue obligado a servir a Onfale como castigo por el asesinato de su esposa y sus hijos.
Durante su tiempo juntos, Onfale se convirtió en la dominante de la relación. Se dice que ella lo vestía con ropas femeninas y lo obligaba a realizar tareas domésticas, como hilar lana. Este episodio es conocido como la "esclavitud de Heracles".
Aunque la historia de Onfale y Heracles es solo uno de los muchos relatos en los que aparece, su figura se ha convertido en un símbolo de poder y dominio femenino. Su historia ha sido reinterpretada y analizada en diferentes contextos y épocas, lo que demuestra su relevancia e influencia a lo largo de la historia.
Hoy en día, Onfale es recordada como una figura legendaria y poderosa, cuyo nombre sigue siendo reconocido en el ámbito cultural y literario. Su historia nos invita a reflexionar sobre el poder de las mujeres en la sociedad y la importancia de la igualdad de género.